Una verdadera tragedia vivieron los empleados y el dueño del restaurante Petit, en Miramar de Ansenuza, el pasado sábado cuando las llamas consumieron el local.

"Fue devastador. El sábado me avisan que se estaba prendiendo fuego y fue cuestión de un par de minutos. Se prendió fuego todo", dijo Rodrigo Saltanovich, dueño del local.

En ese momento, los empleados comenzaron a transmitir en vivo la situación y las redes se hicieron eco. El propio dueño pidió ayuda desesperado por redes sociales.

"Me prestaron seis hornos pizzeros grandes y todo el mundo vino a ayudarnos a limpiar porque el local era el más grande del noroeste de la provincia de Córdoba", aseguró.

Al otro día, casi como un milagro, Petit volvió a abrir sus puertas.

"No puedo creer la actitud de la gente, es muy emocionante", expresó.